“¿Resolución de Año Nuevo?"
Por Krystal Montgomery y Roland Flasch
¿Hiciste una resolución de Año Nuevo este año? ¿Qué tal? Los estudios muestran que el 80% de las personas que hacen resoluciones ya han renunciado al segundo viernes de enero. ¿Por qué? Quizás la resolución es demasiado difícil o un cambio demasiado drástico, lo que dificulta su mantenimiento. O tal vez decidimos cambiar demasiadas cosas a la vez.
Este tema ha estado apareciendo de varias maneras durante el último mes. Los niños de nuestro Grupo de Jóvenes Great Adventure hablaron sobre comprometerse a orar solo un minuto al día. El truco es tomarse un minuto de un momento ocupado o lleno de su día para orar de rodillas. La Sra. Schissel lo llamó un "Minuto heroico". El Instituto San Josemaría describe esta práctica como una que puede conducir al crecimiento espiritual y, finalmente, a la "Victoria Espiritual".
Nuestros grupos de bienvenida también han estado hablando sobre lo que significa ser un "católico dinámico". La semana pasada hablamos sobre el cambio en su forma más pequeña y menos amenazante que suele ser la más exitosa. El libro de formación habla de dar un pequeño paso... solo un minuto al día para tener una conversación con Dios. Cada semana podrías dar un pequeño paso más... Te sorprenderá el impacto que tendrá en tu vida.
Entonces, aunque hayamos pasado ese segundo viernes de enero cuando el 80% de nosotros abandonamos nuestras resoluciones, ese no tiene por qué ser el final de todo. Algunos planes deben modificarse o ajustarse para tener éxito. A veces necesitamos dar pequeños pasos para llegar a esa línea de meta en lugar de dar un salto gigante. Necesitamos hacernos la pregunta: ¿oraste al respecto? Tal vez Dios te está llamando a cambiar o agregar una pequeña cosa. Cada día es una nueva oportunidad para comenzar de nuevo.